Introducción

¿Has deseado cerrar los ojos y nunca volverlos a abrir? ¿Te ha dolido tanto la nostalgia que la vida misma se te hace miserable? ¿Te has mirado en el espejo preguntándote incesantemente que cambio? ¿Has visto pasar el tiempo frente a ti deseando desde el fondo de tu alma que se acabe ese silencioso martirio que va abriendo un oscuro vacio en tu pecho? ¿Has deseado con todo tu ser salir corriendo, huir si es preciso, y en un suspiro consumirte, desaparecer? Cuando tus ojos se cubren de espesas lágrimas sin razón aparente, y la vida se te presenta como un suplicio eterno, están de más las palabras de aliento, los amigos y la misma familia que se preocupa por tu bienestar.

Cuando la tristeza y la desesperación hace acto de entrada en tu vida, no hay aliciente que merme el dolor a corto plazo; poco importan los consejos, poco importa tener un amigo a la mano. ¡Qué poco valoramos lo que nos ofrecen! Preferimos regodearnos en el dolor y ser miserables antes de alzar la mano y pedir ayuda, somos masoquistas, partidarios del sufrimiento, victimas de nuestra propia conciencia, ¡cuánto oscuro placer sentimos al lamer nuestras heridas! ¡Vaya que nos gustan los dramas personales! Somos criaturas fascinantes, ¿Verdad?

Miseria, la segunda virtud más importante del ser humano. ¿Qué cual es la primera? El amor, indudablemente el amor, es la piedra con la que todos tropiezan, es la pared contra la que todos habremos de colapsar en algún momento y, luego, yaciendo ahí tendido bajo los influjos de ese elixir mágico, nos olvidaremos de nuestra propia existencia mientras el ser amado comparte y hace suyo el sacrificio o bien, se desentenderá de tus preciados favores. Solo te quedan dos caminos joven mortal: dar y recibir, ser bien amado, o… dar sin recibir nada a cambio, sacrificarte sin recibir sacrificio alguno a cambio y llorar por toda tu existencia la desventura de no ser en equidad amado.

A sufrir, pues, que ha eso se venido a esta vida, por que ya bien dicen ciertas palabras sabias que escuche por ahí cierto día, solo de dolor se aprende, y tienes muchos años delante de ensayo y fracaso, golpéate lo suficiente, desgástate lo necesario, hasta que la vida de recompense o en el camino seas olvidado.

+ Vampira Crápula +/For Those Loveless Lonely Nights